Guarde las margaritas que me obsesionaba deshojar, y comencé a cortar dientes de león, para ver volar sus frutos... Observé entonces que se dibujaban en el cielo miradas, y también silencios, y quizás ternura. (Solo quizás)
SI SABES VOLAR, ACÉRCATE AL ABISMO.
CAER ES UN RIESGO QUE SIEMPRE HAY QUE CORRER.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Carpe diem =)