Es curioso como a veces, mientras descansas, quizás lees un libro, dibujas, o miras una película, te vienen a la mente imágenes de la infancia, pequeños "Flashback" o incluso "Déjà vu" en momentos determinados, haciendo esto o aquello, y piensas:
-" Qué feliz era entonces. En esa delicada y preciosa inocencia en la que nuestros padres nos envuelven. Quizás no hubiera podido avanzar en este camino del cielo al infierno si no hubiera recibido tanto cariño, tanta ternura, tantos abrazos, mimos y besos. Que infeliz hubiera sido con vuestra ausencia, prefiero una y mil veces la vida que me ha tocado vivir, casi no vivirla en el sentido normal de la palabra, estar siempre en cama, en el hospital o en casa, llena de cables, los dos trasplantes, no andar en 6 años, las mil y una enfermedades pasadas, a haber vivido sin vosotros. :-
Y lo piensas, y lo afirmas, y lo sabes a ciencia cierta. Creo que por lo único que recé durante años fue para morir antes que ellos, que no me dejaran sola. El dolor, y todo lo demás, ¿que importaba? Mamá me tenía en brazos, papá me cogía a los hombros y saltaba conmigo para hacerme reír...
Nunca podré daros las gracias por haber renunciado a la vida entera. 31 años sin separaros de mi cama, siendo médicos, enfermeros, auxiliares, celadores, profesores, y dioses para mi.
No caigáis nunca. Todo el mundo dice que soy una luchadora incansable, pero porque tengo dos apoyos incondicionales a mis espaldas que no me dejan caer del todo. Si caéis, esperadme. Para mi, la vida sin vosotros no tendría sentido. Os adoro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Carpe diem =)