Hubo noches en las que dejaba la corona de princesita en el armario y cogía la espada,el casco y la armadura...Porque no había noche sin lucha a muerte conmigo misma, recordando los principios y los finales de las interminables guerras que, sin posibilidad de vencer, declarábamos igualmente la paz, sintiéndonos los dos victoriosos y exhaustos en cada uno de los lados de tu cama...

Brindemos por muchas mas guerras que acaben con una mirada, un beso y una flor en la mesita de noche.TQ